Aunque nadie crea en ti, tú sigue haciéndolo

Cuando te preparas para un objetivo lo mejor es pensar en grande, tenerlo todo lo que sea controlable, bajo control. Si no dejas nada a la improvisación, mejor. Aún así, aún planificando tendrás algún que otro tropiezo y muchas cosas que dependen de terceros, de la burocracia, de tu rival, de las circunstancias, etc. Así que mejor diseñar, planificar  y estar preparado te darán seguridad y aumentará tu éxito.

Otra cosa importante además de innovar, de pensar diferente, es que no dejes nunca de formarte y de estar abierto a lo nuevo, aunque sea para rechazarlo. En el momento que pensemos que lo sabemos todo, comenzará nuestra decadencia.

Si quieres mejorar, necesitas prestar atención. Entrenar duro pensando en otra cosa y sin estar 100% presente, es perder el tiempo. Hay muchas personas que le dedican horas y horas al trabajo, pero sin eficiencia. Les interrumpe el móvil, contestan a un whassapp, un compañero se les acerca, se levantan a por el café, pasan de un tema a otro, simultanean varias tareas, largas reuniones que se empiezan tarde y no se sabe cuándo acaban. Un atentado contra la atención. Si somos capaces de prestar atención plena al presente, le sacamos mucho más provecho. Una tarea a la vez, y una detrás de otra, pero no todas mezcladas.

El deber por encima de postergar. Quien algo quiere, algo le cuesta. Someterte a una carrera tan dura implica que hayas trabajado el esfuerzo y la lucha contra la adversidad en tus entrenamientos. Muchos deportistas se quedan en el camino porque cuando se enfrentan al esfuerzo de la competición se dan cuenta de que nunca han entrenado ese nivel de dureza física y mental. Si al primer contratiempo te retiras, si te da pereza, si dejas para mañana el objetivo de hoy, lo más probable es que también te ocurra en una competición o cuando tu proyecto se ponga cuesta arriba. Para tener autodisciplina necesitas una rutina y un plan de entrenamientos, y no saltártelo, salvo que un problema justificado te lo impida. Si aprendes a postergar, cada vez lo harás más y cada vez te dará más pereza empezar lo que dejaste.